En la actualidad existe mucha información sobre una buena alimentación, y en ocasiones, creemos que podemos ser nuestros propios nutricionistas. De esta manera llegamos a padecer la ortorexia, un trastorno alimentario que se caracteriza por una continua obsesión con la comida sana.
Las personas que padecen este trastorno desarrollan sus propias reglas alimentarias, cada vez más estrictas, obligándose a seguir una dieta que excluye la carne, las grasas, los azúcares, los alimentos cultivados con pesticidas o herbicidas y las sustancias artificiales que puedan dañar el organismo.
Los ortorexicos llegan a ser tan obsesivos que incluso se sienten culpables y corrompidos cuando incumplen sus reglas alimentarias, y se castigan con dietas y ayunos aún más estrictos.
Se conoce que algunas de las personas que padecen este trastorno han sufrido anteriormente anorexia. Por lo que pasan de preocuparse por la cantidad de comida que ingieren a obsesionarse con la calidad de la misma.
Asique… ¡Vive sano! ¡Pero no obsesionado!
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